Quieres sabes quien soy?

Me han cansado las preguntas
que le haces a mi interior
y te aclararé esas dudas
de querer saber quién soy...

Soy esa persona errante
que a tu lado va a caer,
soy lamento de un amante
que sólo sabe perder...

Soy estrella que alumbraba
solamente para ti,
soy aquella mano helada
que tu cuerpo recorrió...

Soy silencios y reproches
que en silencio convertí,
soy también mil y una noches
que contigo compartí...

Soy un ángel deprimido
que hoy necesita tu amor
y soy quien sueña contigo
mientras muere el corazón..."

Desdicha

Acaso conoces mi vida?
Sabes el por que de mis desdichas?
Dime la causa de mis penumbras
Por que en realidad estoy llegando a la locura
Toda mi vida es solo una amargura
Que causa en mi alma una negrura
En las mañana derramo mi primera lagrima
Pero durante el día esta no es la última
Salgo a caminar y solo encuentro dolor
Sintiéndome un fantasma sin razón
Observo a los demás sonreír
Con algo de celos por no conocer ese sentir
Observo los amantes unidos
Por un lazo de amor irrumpido
Observo a los amigos divertidos
Que ríen espontáneos si temores infundidos
Y mírame a mi, pobre fantasma olvidado por el destino
No más que con el rostro adolorido
Por el fluir de mis lágrimas tan seguido
Solo con mi soledad seguir mi camino
Y con el llanto no dejándome llegar al olvido
Solo puedo seguir caminando ya que este es mi destino.

Algo tirado

Mientras caminaba encontré un corazón,
Recordé que yo hace mucho tuve uno
Que me hizo sentir emociones que se fueron apagando,
Al ver este otro en el suelo aún latiendo
No pude sopórtalo,
Sabía que muchos no se habían dado cuenta de que existía;
Lo patearon como al mío,
Le escupieron,
Lo dejaron agotado,
Mal trecho,
Agónico,
Hasta que simplemente
Fue imposible seguir cargando aquello
Y lo mejor fue arrancarlo de una buena vez
Sin importar un último dolor,
La curiosidad de saber si me quedaba era grade
Pero recordé las noches junto al teléfono,
La almohada indiferente,
El insomnio recurrente,
Y ya no quise volver a pasar por eso;
Me aleje respetando el lugar donde estaba,
Me sentí reconfortado al pensar
Que alguien mas anda por la ciudad por ahí sin tener uno.

Si el corazón no viene...

El corazón piensa por si solo, duele por si solo, despierta y sueña... No lo puedo seguir, no controlo sus emociones, me pierdo en sus constantes y adoloridos caminos, rocosos y puntiagudos. Siento su dolor y no puedo aguantar sus pisadas y sus cuchillas me apuñalan salpicando el camino de sangre. Caminando por ese camino de rosas negras, cementerios de capullos y espinas, siento como si su vida, me consumiera. Mi corazón me ayuda a sentir, pero me asesina con sus sentimientos...

El ángel y el diablo

Dios y Diablo, tan similares, tan diferentes, constantes al prejuicio del hombre, a aquel ser que tanto odian. Ambos con remordimientos hacia lo sucedido. Hacia aquel extraño suceso que nadie quiere recordar, aquel horrible lugar. Donde el calor se congela y el frio se derrite, permitiendo entrar hasta el último rincón de mis memorias absolutamente cerradas a mi conciencia y al puro hecho de no sentir. Siento, no siento, no importa, ambos me vigilan y siento como se separan para lado diferentes y olvidan mi absoluta presencia. Dios y Diablo, tan similares, tan diferentes.

A parte de...

Necesito sentirme parte de. Sentir que se me tiene en cuenta, que soy incluida, que soy una más. Y a veces, con algunos grupos, con algunas relaciones que en su día fueron muy importantes, y que en su día, también, debí de estropear sin saber muy bien qué estaba haciendo mal, sin advertencias no-sigas-por-aquí, simplemente estropeándolas... bueno, llego al presente y veo que ya no hay manera de reparar lo que hice ayer o antes de antes de ayer. Y que hoy no estoy ahí, no soy una más, ni menos ni nada, simplemente no estoy, no existo.

Me duele, me desgarra de a poquitos. Porque yo me miro hoy y creo que hago las cosas de manera distinta, que no me cuelgo del cuello del vecino hasta asfixiarle, creo que me reparto mejor y tengo relaciones más sanas, más bidireccionales... pero hay personas que se quemaron en el pasado conmigo y ya ni siquiera parecen tener interés en comprobar si sigo cometiendo los mismos errores o no.

Anoche, mientras navegaba, haciendo tiempo hasta que me entrara el sueño, volví a ser plenamente consciente de las relaciones que ya no tengo, de los amigos que no lo son, de cuánto echo de menos y de cómo no tengo armas para rehacer el pasado, y cómo ese pasado condiciona sin solución posible el presente. Y me sentí aparte de en vez de ese parte de que necesito. Aparte del grupo, aparte de las risas, aparte de los encuentros, aparte de las propuestas. Aparte de todo. Y volví a sentirme chiquita, apartada como hace muchos años, como una muñeca rota olvidada en un rincón, como el columpio de la foto, oxidándose por momentos en medio de ninguna parte.

Justo lo que me hacía falta...